El vehículo fue puesto en marcha de la mano de la Empresa Casal en una prueba piloto en las líneas M-121, M-122, M-111, M-115 y M-130, que unen la capital hispalense con Alcalá de Guadaíra, La Rinconada, Alcalá del Río y la barriada de Montequinto, en Dos Hermanas.
En estas pruebas se mide el ahorro de CO2 de las baterías, el consumo de energía del vehículo en funcionamiento, la duración de carga y tiempo de recarga, porcentaje de consumo de las baterías y otras cuestiones operativas como distancias recorridas, registro horario, ubicación, velocidad, tiempos de paradas y tiempos de inactividad.
El autobús eléctrico es de la marca IVECO, modelo eWAY, tiene unas dimensiones de 10,7 metros de largo por 2,3 metros de ancho, más estrecho de lo habitual, lo que hace que sea especialmente atractivo para su puesta en servicio en centros históricos de las ciudades, dónde las dimensiones del callejero suelen ser más reducidas. Está equipado con baterías tipo Zen Lion Litio de 350 kWh y tiene una potencia y un tiempo de carga de 100 kWh y cuatro horas, respectivamente, siendo el Sistema de recarga Combo 2 (CCs2). La potencia del motor es de 2500 Nm.
Con las pruebas de autobuses eléctricos en la flota metropolitana, se deja patente la apuesta del Consorcio de Transportes por el uso de vehículos cero emisiones, lo cual se enmarca dentro de la Estrategia de Movilidad y Transporte Sostenible impulsado por la Consejería de Fomento.
