El bus-VAO, por el que circulan solamente autobuses y vehículos con dos o más ocupantes en el interior, va a ser ensanchado para evitar las aglomeraciones que provocaba la avería o accidente de algún vehículo dentro del mismo. El Ayuntamiento de Madrid comenzará las obras a principios de enero. En principio, se terminarán un año más tarde. Se acometerá la obra en dos fases. Primero se ensanchará el carril (presupuesto de 500.000 euros) para lo que se utilizará parte de la mediana que lo separa de los demás carriles. Posteriormente, se ampliarán los carriles de las calzadas laterales, destinados al tráfico privado (presupuesto de 11 millones de euros). El resultado no será que los coches puedan circular en paralelo, sino que en caso de emergencia, los automóviles podrán adelantar al vehículo averiado.
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