En términos generales, la reforma fiscal no supondrá un aumento de la presión fiscal para los consumidores. Más de 1,1 millones de coches se verán beneficiados por una rebaja fiscal, respecto a los actuales tipos vigentes. Esta disminución de recaudación se verá compensada por el incremento de los tipos del impuesto de matriculación vigentes en la actualidad a los vehículos más emisores, de manera que la recaudación fiscal total por el impuesto de matriculación se mantendrá en unos niveles similares a los actuales. También es neutra desde el punto de vista tecnológico pues no privilegia ningún tipo de tecnología sobre otra. La reforma fiscal tendrá además un efecto social importante ya que las rebajas fiscales beneficiarán fundamentalmente a los vehículos de gama media o media baja que son los más vendidos y fabricados en el mercado español. ANFAC considera también que la prórroga y mejora del Programa PREVER, que finaliza el próximo 1 de Enero de 2008, tal y como viene solicitando el sector al Ministerio de Economía y Hacienda, complementaría de una manera mucho más eficaz desde el punto de vista medioambiental, las medidas fiscales aprobadas.
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