La Fundación Transporte y Formación ha desarrollado un proyecto, con la colaboración del Instituto Universitario de Investigación del Automóvil de la Universidad Politécnica de Madrid (INSIA), para delimitar qué debe entenderse por “simulador de alto nivel” en el contexto del Real Decreto 1032/2007, mediante el establecimiento de las características técnicas mínimas que los simuladores de conducción deben cumplir.
Las características específicas propuestas para considerar a un “simulador de alto nivel”, hacen referencia a los siguientes aspectos: puesto de conducción; plataforma de movimiento; sistema de visualización; modelos matemáticos y/o físicos; puesto de instructor; edición y visualización de ejercicios; y, finalmente, aspectos pedagógicos de los ejercicios. Con ello, se pondrá de manifiesto su adecuación y utilidad respecto a los objetivos de la formación en el contexto que se establece en el Real Decreto 1032/2007, y permitir así “evaluar la formación sobre conducción racional basada en las normas de seguridad, en particular por lo que respecta al control del vehículo en función de los distintos estados de la calzada así como de sus variaciones en relación con las condiciones atmosféricas y la hora del día o de la noche”.