Se ha instalado este sistema en tramos de la ciudad de Seúl y el campus del KAIST. El OLEV recibe energía de forma inalámbrica gracias a una nueva tecnología conocida como SMFIR. Esto supone que la electricidad es recibida desde la propia calzada porque los cables eléctricos están enterrados y crean un campo magnético que interactua con el receptor colocado bajo el autobús.
Si la prueba es positiva, se sumarán a los dos vehículos piloto otros diez más en 2015.
KAIST