Fundació TMB, la preservación de autobuses desde el ámbito público

Tras analizar detalladamente los autobuses preservados por la Associació per a la Recuperació i Conservació d'Autobusos (ARCA), ahora miramos a las empresas que también cada día le dan más importancia a mantener viva su propia historia y la memoria colectiva de todos nosotros. Es el caso de TMB, que cuenta con algunos de los ejemplares más singulares conservados en la actualidad.

Si tenemos en cuenta que los recursos económicos y humanos que requiere a preservación de autobuses, aún tiene más mérito que esta actividad la realice una empresa pública, que en principio debe rendir cuentas a los ciudadanos y centrarse únicamente en el transporte de viajeros. Sin embargo, la empresa pública que lleva a cabo el servicio en la ciudad condal, Transports Metropolitans de Barcelona (que agrupa a la concesionaria de autobuses Transports de Barcelona y al operador de metro Ferrocarril Metropolità de Barcelona) ya lleva varios años promoviendo la recuperación de algunos de sus vehículos más emblemáticos.
 
Hasta hace una década, la preservación de autobuses en España estaba prácticamente reservada al ámbito privado (salvo honrosos casos como el Guy Arab nº 19 de la EMT de Madrid) y por desgracia, el patrimonio histórico iba disgregándose y desapareciendo progresivamente. Sin embargo, en el caso de Barcelona, gracias a la curiosa donación de los Pegaso 6038-A articulados a la Universitat Autònoma de Barcelona y a un innovador proyecto de Museo del Transporte que lamentablemente acabó de la peor forma, se ha podido conservar un buen número de ejemplares. Eso sí, queda por delante una ardua labor de restauración para conseguir que luzcan como antaño.
 
TMB, a través de una Fundación de reciente creación, se encarga de gestionar estas tareas que ya cuentan con resultados visibles y palpables. En este momento, la empresa dispone de una veintena de autobuses en proceso de restauración, y tres vehículos clásicos en perfecto orden de revista. Además, atendiendo al resto de su patrimonio, la Fundación también dispone de unidades de metro y tranvías rehabilitados.
 
Sin duda la llegada del decano Dodge Brothers al patrimonio de TMB ha sido la más curiosa. Este autobús, carrozado en 1939 por Majoral prestó su servicio como transporte de trabajadores en la fábrica textil Can Font, en Igualada (Barcelona), y en 1995 fue adquirido por el Museu del Transport, que procedió a su restauración.
 
Con la desaparición del museo, TMB se hizo cargo de su antiguo patrimonio, así como de este extraordinario ejemplar. Para dotarle de coherencia histórica, aunque nunca llegó a circular en servicio por las calles de Barcelona, se le adjudicó la calca 265 (procedente de un autobús que llegó a la antigua concesionaria C.G.A. del que únicamente se conoce la matrícula) y se le pintó la librea correspondiente a su época.
 
Además, el recientemente restaurado Chausson que circulo en la empresa metropolitana Urbas (asimilada a TMB en los años 60) también ha conseguido girar de nuevo su motor, esperándose su puesta de largo en el próximo Ral·li Barcelona-Caldes de Montbui que tendrá lugar a finales de mayo. Finalmente, uno de los dos Pegaso 6038 que se conservan preservados -concretamente el 7092- también luce su esplendor como antaño, encontrándose en perfecto estado de marcha.
 
Además de estos tres autobuses impecables, la Fundació TMB también dispone de cuatro Pegaso 6035-A en estado de marcha, pero que todavía están pintados con la librea de la Universitat Autònoma de Barcelona, su anterior propietario (que a su vez los adquirió a la propia TMB años ha). Tal vez en alguno de los próximos eventos haya alguna sorpresa y podamos contemplar un 'gemelo' al articulado de ARCA…
 
En los almacenes de TMB quedan verdaderas joyas todavía aún por restaurar. Algunos de ellos apenas necesitan ajustes, porque tampoco hace tantos años que finalizaron su servicio: es el caso del MAN de dos pisos ex-Berlín que prestaba servicio en el Bus Turístic, el Pegaso 6420 o el Mercedes-Benz articulado O405G. Pero además se encuentran algunos ejemplares únicos con un arduo trabajo por delante, dadas las delicadas condiciones en las que se encuentran. Entre ellos, destacan el Aclo Regent de dos pisos, dos Aclos reconvertidos a un piso, el Pegaso 5020 Seida, el Chausson Seida, el Pegaso 6035 estándar,… que dan muestra de la historia del transporte en Barcelona. Junto a ellos, descansa alguna rara avis como el Bus Cultural (un Pegaso 6035 con un carrozado peculiar) y un prototipo de  Pegaso 6420.
 
El esfuerzo de TMB y de la Fundació TMB por recuperar el patrimonio es encomiable, y justo ahora está dando sus primeros frutos. De su mano, cada vez son más las compañías públicas y privadas que apuestan por la preservación de sus vehículos más antiguos como un homenaje a sus ancestros y la historia que todos hemos vivido.

 Texto: Andrés Susany (jefe de prensa ARCA)

También te puede interesar