Según el estudio realizado por La Oficina del Defensor del Menor en la Comunidad de Madrid y el Instituto Mapfre de Seguridad Vial, el 85% de los encuestados tiene sistemas de retención infantil instalado en el vehículo pero de ellos, solo el 69% los usa siempre. El resto no los utiliza por pereza, porque realizan trayectos cortos. Sólo el 40% de los encuestados sabe que su hijos reciben clases de seguridad vial en el colegio. Usar los sistemas de seguridad evitaría 1000 muertes de menores en accidente de tráfico.
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