"La transición a la movilidad de cero emisiones y la recuperación de la crisis de COVID son las prioridades centrales de la industria de autobuses de la UE en este momento", declaró Kuchta después de su nombramiento.
“Los fabricantes de autobuses de Europa están desarrollando soluciones pioneras para ayudar a las ciudades a reducir la congestión, la contaminación y el ruido en paralelo. La movilidad eléctrica será una solución clave para lograr esto, pero requiere la infraestructura de carga adecuada en los lugares correctos, como nodos urbanos, aeropuertos y terminales de autobuses”, explicó Kuchta.
Es por eso que ACEA está instando a la Comisión Europea y a los estados miembros a aumentar el apoyo a la infraestructura de combustibles alternativos dedicada a los autobuses, como parte de la revisión de la ley europea de infraestructura de combustibles alternativos (AFID) que se espera para finales de este año.
Los autobuses con carga eléctrica representaron el 6,1% del total de nuevos registros en la UE el año pasado, y los autobuses eléctricos híbridos representaron el 9,5%. Más del 11% de todos los autobuses nuevos vendidos funcionaban con combustibles alternativos, casi todos con gas natural. Todos los vehículos de propulsión alternativa combinados representaron más de una cuarta parte del mercado de autobuses de la UE en 2020, y los autobuses de motor diésel representaron alrededor del 73% del mercado total.