El AMB tendrá otros 162 autobuses eléctricos con los fondos Next Generation

Continúa así apostando por la movilidad libre de emisiones

El AMB estuvo presente en la feria Smart CITY 2021, que tuvo lugar en Barcelona del 16 al 18 de noviembre. En sus dos stands expuso todas las medidas llevadas a cabo en el área metropolitana de Barcelona para transformar la movilidad y mejorar la calidad del aire. Pero también presentó los proyectos que pondrá en marcha con los fondos europeos Next Generation, en los que optan a conseguir 230 millones de euros: 175,5 millones se destinarán a los municipios de más de 50.000 habitantes, 13,6 millones serán para los municipios de entre 20.000 y 50.000 habitantes y otros 40 millones servirán para poner en marcha 19 actuaciones concretas.

Todos los planes del AMB se fundamentan en cuatro ejes principales: crear nuevas ZBE en otros 6 municipios del área metropolitana, el impulso a la movilidad en bicicleta creando un potente sistema público metropolitano de bici pero también el reparto de mercancías en este modo, la digitalización del transporte público para mejorar tanto la información como la accesibilidad, y la compra de autobuses cero emisiones.

Los fondos Next Generation impulsarán 19 proyectos
De los 19 proyectos que se pondrán en marcha con 40 millones de los fondos europeos, habrá 5 destinados específicamente al autobús. Además de mejorar la accesibilidad en las paradas e implantar un nuevo sistema de información al usuario a bordo de los autobuses, un sistema de video-vigilancia y otro de conteo automático de viajeros para la flota de la TMB, se apostará fuerte por la electrificación de las cocheras y de todas las flotas, tanto de TMB como de los demás operadores metropolitanos. En concreto, llegarán 123 autobuses eléctricos a la TMB y otros 39 estarán en las flotas de las empresas con servicios metropolitanos del AMB.

La movilidad no cambia si no cambian los hábitos
El AMB lleva años diseñando como serán sus ciudades en el futuro: lugares más habitables y con una movilidad libre de emisiones. Por ello, antes de implantar su pionera ZBE o acometer los cambios previstos, hizo un trabajo de reconducción de hábitos con iniciativas como la tarjeta para viajar gratis en transporte público durante tres años a quienes achatarran su coche y no comprasen otro. Resultado: 12.700 personas se han pasado al transporte público. Además, para quienes no han dejado el coche, se potencia la combinación de modos, pudiendo dejar su vehículo en un Park and Ride y coger allí el transporte colectivo. Ahora tienen 423 plazas de aparcamiento pero llegarán a ser 1.500 plazas según el objetivo de AMB. 
Precisamente el aparcamiento seguro de bicicletas en nudos de transporte estratégico, Bicibox, con más de 17.000 usuarios, junto con el desarrollo de carriles con Bicivia han impulsado el uso de este modo. No se trataba tanto de pasar viajeros el coche al transporte colectivo, como de eliminar turismos de las calles potenciando cualquier tipo de movilidad activa y limpia, como puede ser también la bicicleta.

En cuanto al transporte público metropolitano, el AMB cuenta con 231 líneas y más de 1.900 vehículos. El 27,75% de esa flota está compuesta por vehículos híbridos y eléctricos. A ellos se suman 8 líneas de metro con 181 trenes. Para tener toda la información se ha creado la App Mobilitat AMB.
Según los planes del AMB, para 2025, habrá más de 800 autobuses de su flota con tecnología limpia, de los cuales más de 300 serán eléctricos y 40 serán de hidrógeno. En 2030, el 90% de su flota será de baja emisiones.

Pero no sólo se potencia la compra de vehículos más ecológicos sino un modelo de transporte en autobús mas eficiente. Es el caso de las 11 líneas AMB EXPRÉS, que son rutas rápidas sin apenas paradas intermedias entre origen y destino, y de las 9 líneas AMB METROBÚS, que se basan en la alta frecuencia, con menos de 10 minutos de espera.  Además, se implanta la app para Bus a Demanda.

AMB impulsa la nueva movilidad con nuevos vehículos, nuevos modos, nuevos tipos de línea, tecnología de última generación y, sobre todo, trabajando en los nuevos hábitos de los ciudadanos.
 
 

Barcelona y su área metropolitana han sido pioneros en la implantación de sus Zonas de Bajas Emisiones, un plan llevado a cabo con valentía que ahora sirve de ejemplo a los 148 municipios de más de 50.000 habitantes que tendrán que implantar por ley su ZBE.

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