En este sentido, Sunsundegui ha presentado el Plan de Viabilidad 2022-2027, horizonte en el que espera alcanzar su viabilidad de empresa y ser capaz de afrontar el reembolso del apoyo financiero público temporal; un plan que ya en 2019 obtuvo la calificación de “B” por la agencia externa de rating designada por Cofides, y que busca el incremento en las carteras de pedidos y el desarrollo de nuevas carrocerías y modelos de cara a futuro.
Este plan prevé la obtención de financiación de Cofides y vía alianzas con potenciales inversores; el desarrollo de nuevos productos, con la previsión de carrozar vehículos eléctricos ya en 2024; la expansión a otros mercados europeos; mejora de la productividad; un plan de digitalización de la empresa; así como la potenciación de la seguridad laboral y medioambiental, y un plan de recuperación de empleo. En definitiva, lograr una empresa solvente, sostenible y con futuro.
Sunsundegui puso de manifiesto en ese encuentro que la situación actual de la compañía es el resultado, al igual que para el resto de las compañías del sector, del impacto negativo de la pandemia de la Covid-19 en el turismo, los viajes y, en general, en el transporte por autobús de pasajeros. Así, la actividad de Sunsundegui se vio afectada con la paralización de la producción durante los meses más duros de confinamiento de 2020 y la posterior drástica disminución de la cartera de pedidos para 2021 y siguientes ejercicios.
