Este sistema, adjudicado a la multinacional tecnológica GMV tras una licitación pública, reducirá el tiempo de subir y bajar de los pasajeros, mejorando así la velocidad comercial del servicio y se compone de validadoras embarcadas de última generación. El equipo suministrado por GMV está preparado para soportar también lectura de tarjetas sin contacto NFC y lectura de tarjetas bancarias EMV. De esta forma, el sistema podría ampliarse en el futuro manteniendo el mismo equipamiento hardware, con la introducción de acceso mediante tarjeta de transporte o mediante tarjeta bancaria.
Estas nuevas validadoras, que estarán en funcionamiento antes de finales del 2023, también podrán ser monitorizadas desde el centro de control de TMB para mejorar el servicio, recibiendo los datos de pasaje por horas y lugares de interés.
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El sistema entrará en funcionamiento antes de finales de 2023
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