En su comunicado señala que en el marco de esta negociación interterritorial sobre el nuevo mapa concesional, «el Ministerio ha ratificado su compromiso de ofrecer a las comunidades autónomas una financiación extraordinaria de más de 40 millones de euros con el objetivo de que gestionen, desde su ámbito competencial, los desplazamientos interurbanos de la ciudadanía que hasta la fecha se han venido asumiendo por parte de la Administración General del Estado, incluso para rutas internas dentro de la propia Comunidad Autónoma.
De esta forma, desde la red estatal se gestionará la demanda de viajeros de largo recorrido, que permitirá una conexión más rápida y directa de los principales núcleos de población, al mismo tiempo que las Comunidades se harán cargo de los tráficos regionales de su competencia, que se han venido prestando hasta ahora en las concesiones de transporte de viajeros por autobús que administra el Ministerio.”
Transportes prestará los servicios con el actual esquema de concesión estatal en el caso de que las autonomías no quieran asumir la gestión de las rutas
“Para facilitar la gestión de los recorridos intraautónomicos, la Administración General del Estado pondrá por primera vez a disposición de las comunidades fondos destinados exclusivamente a financiar los servicios de transporte que anteriormente estaban cubiertos de forma estatal. El cálculo de la financiación será fijado conforme a criterios objetivos y rigurosos que tengan en cuenta las características específicas de densidad, orografía y distribución de población de cada territorio.
En cualquier caso, si las comunidades autónomas no aceptan la segregación de servicios ni la gestión de los tráficos de su competencia, estos se seguirán prestando a través de concesiones de la Administración General del Estado.”
Reducción de tiempos y tarifas
“El diseño del nuevo mapa concesional, que presenta la reorganización de los servicios en 22 corredores, contempla la optimización de las rutas en desplazamientos entre comunidades autónomas, haciéndolas más rápidas. Esta organización permitirá una reducción de unos 20 minutos de media por ruta llegando incluso, en algunos casos, a disminuir los tiempos de viaje hasta en 3 horas.
Asimismo, se estima que la renovación de las rutas permitirá una reducción de tarifas en torno al 20% y un incremento de la ocupación de los vehículos en un 40%, lo cual repercutirá en menores emisiones por viajero (un 25% menos).
En definitiva, el objetivo esencial es que las concesiones estatales canalicen los grandes flujos de transporte en autobús, adaptándose a la demanda actual y haciendo más competitivo y eficiente el transporte colectivo por carretera. Un nuevo enfoque que requiere de cogobernaza y de la plena colaboración entre el Estado y las autonomías para conseguir la vertebración del territorio y dotarlo de capilaridad, bajo el principio esencial de que ninguna persona pierda sus actuales oportunidades de viaje y que la conectividad de la ciudadanía esté totalmente garantizada.”