Este nuevo centro de transportes cuenta con 12.300 metros cuadrados de superficie, de los que 6.250 son cubiertos, y acogerá básicamente a los autobuses de la EMT de Madrid. Está conectado directamente con el nuevo vestíbulo norte de la estación de Metro que también se ha renovado. Gracias a las nuevas instalaciones cubiertas, los viajeros estarán resguardados de las inclemencias meteorológicas. De hecho se han instalado unas mamparas protectoras que evitarán el paso de corrientes de aire y al mismo tiempo, se ha levantado una estructura de materiales cálidos, como la madera, en la que se ubican diferentes estancias (sala de espera, cafetería, tiendas, aseos…) que darán servicio a las 270.000 personas que pasarán a diario por allí. Contará además con una pequeña zona comercial que haga el intercambio más atractivo para los 23 millones de viajeros anuales que lo usarán.
El intercambiador, que entrará en servicio el próximo martes 10, conecta tres líneas de metro, 37 líneas interurbanas y 21 de la EMT tras realizar una inversión de 17 millones de euros. Esta nueva infraestructura está dotada con 18 dársenas de autobús que complementan a las 30 del intercambiador subterráneo inaugurado en 2008.
Aprovechando la inauguración de éste intercambiador, desde el 6 al 9 de noviembre estarán expuestos en sus dársenas diferentes vehículos que han prestado servicio al transporte público de Madrid, haciendo un recorrido por la Historia de la movilidad colectiva de la ciudad en el marco de una muestra que lleva por nombre “De ayer a mañana”. El lunes será el día para que los madrileños que lo deseen puedan disfrutar de esa ruta de casi 20 kilómetros que entre otros enclaves recorrerá el Palacio Real o la Catedral de La Almudena y que saldrá a las 10 de la mañana desde Plaza de Castilla.
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