La pandemia del coronavirus, la baja producción de automóviles debido a la escasez de componentes electrónicos, así como los importantes aumentos de los costes en las áreas de adquisición y logística tuvieron un impacto especialmente significativo en las ventas y los beneficios de la empresa que cotiza en el DAX. No obstante, Continental alcanzó sus objetivos anuales. Con su estrategia reajustada y su correspondiente estructura orientada al mercado, la empresa tecnológica también fijó estratégicamente su rumbo para el futuro.
"El pasado año fiscal fue de nuevo muy difícil para nosotros. A pesar de los numerosos retos, hemos tenido un buen rendimiento operativo en 2021 y hemos conseguido un beneficio neto positivo", dijo Nikolai Setzer, CEO de Continental, en la rueda de prensa anual celebrada este miércoles en Hannover. Y añadió: "Mi agradecimiento va dirigido especialmente a nuestros más de 190.000 empleados en todo el mundo. Son un gran equipo que se ha unido para superar las numerosas restricciones y obstáculos a los que se han enfrentado".
Setzer también hizo referencia a la sólida posición tecnológica de la empresa: "La conducción segura, autónoma, conectada y sostenible son las claves para la movilidad del futuro y, en Continental, estamos comprometidos con el desarrollo de estas áreas. Aquí es donde reside nuestra fuerza: desde los sistemas de freno, los sensores de entorno del vehículo, los ordenadores de alto rendimiento y los neumáticos sostenibles, hasta las mangueras para la gestión térmica de los vehículos eléctricos”.
Datos relevantes
• Las ventas consolidadas se sitúan en 33.800 millones de euros
• El EBIT ajustado asciende a 1.900 millones de euros, un 38% más que en 2020
• El beneficio neto se sitúa en 1.500 millones de euros, frente a las pérdidas de 962 millones de euros en 2020
• La compañía alemana propone un dividendo de 2,20 euros por acción