Se trata de los modelos Peugeot iON y Citroën C-Zero, que estarán en pruebas en la EMT hasta el 30 de junio. Los vehículos cedidos por el grupo PSA permiten moverse por la ciudad con soltura gracias a su motor eléctrico de 47 kW (unos 64 CV) y su transmisión automática. Por supuesto, estos coches no generan contaminación acústica ni atmosférica y no emiten ningún tipo de gas contaminante ni CO2 durante su uso. Cuentan con baterías de ión-litio colocadas bajo los asientos traseros asegurando una autonomía en torno a los 130 kilómetros en conducción urbana (150 km de acuerdo a ciclo normalizado NEDC).
La empresa municipal probará los dos coches eléctricos en las tareas diarias de inspección de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos instalada en las calles de la capital. Este acuerdo de colaboración entre el grupo PSA (Citröen y Peugeot) y la EMT responde a los objetivos, marcados por el Ayuntamiento de Madrid y la propia empresa municipal, de ofrecer un servicio cada vez más sostenible y contribuir a la mejora de la calidad de vida de la ciudad mediante la utilización de vehículos no contaminantes o que utilicen combustibles limpios.