Todavía no están en vigor, pues antes deberán ser aprobados por el Parlmamento Europeo y despúes por el Consejo. De momento es tan solo un “acuerdo transaccional sobre las excepciones en los tamaños actuales de camiones y autobuses para mejorar la seguridad vial y reducir las emisiones”.
Los autobuses podrán tener un peso máximo de 1,5 toneladas más, teniendo en cuenta el peso medio de los viajeros y equipaje y los nuevos sistemas de seguridad embarcados impuestos por nuevas normativas.
Los vehículos que usan electricidad o hidrógeno podrán pesar hasta una tonelada más, si es por causa de esa propulsión el aumento de peso pero no para aumentar la carga.
Estas son solo algunas de las principales novedades. Más información.