Nació en Urtiel (Valencia), el 23 de febrero de 1922, donde vivió hasta los 6 años. Los negocios de su padre le llevaron a Valencia, donde estudió bachillerato. El Tesón califica su trayectoria profesional y humana. “Los nacidos en Urtiel y el pueblo próximo de Requena manteníamos una lucha cordial. Nos distinguían con el apelativo de cabezudos y nosotros les correspondíamos con la designación, no menos amistosa, de vinagres”.
Estudió en Madrid la carrera de Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. Tras obtener el título y el doctorado en 1950, ingresó en el Cuerpo de Ingenieros del Ministerio de Obras Públicas, del que hoy es Supernumerario. Gracias al empeño de su profesor de Ferrocarriles, José Mª García Lomas, entró en RENFE como Ingeniero en Prácticas en la 4ª Zona en Valencia en octubre de 1950. Durante 6 meses actuó como factor de estación, vendiendo billetes y como personal de trenes en los fogones de los mercancías. “Creo que ha sido el período más interesante y educativo de mi trayectoria como ferroviario y donde he apreciado el compañerismo de los agentes con los que compartía tareas y su decidida vocación al ferrocarril”. Su tesón le llevó, pasando por diversos cargos durante más de 30 años, de los fogones de un tren a ser Presidente de RENFE en julio de 1982. Solicitó la jubilación voluntaria en enero de 1985 aunque siguió como Consejero hasta noviembre de ese mismo año.
Hablar de ferrocarril en España es hablar de Antonio Carbonell. En noviembre de 1980 fue nombrado Presidente de la UIC, la Unión Internacional de Ferrocarriles, siendo el primer español que alcanzó este puesto. “Quizás de lo que me siento más orgulloso es de haber contribuido en mi etapa ferroviara a modernizar y potenciar el ferrocarril, mejorando la productividad para avanzar técnicamente, pasando de los Guardafrenos para frenar las locomotoras a vapor a sentar los cimientos de la alta velocidad.”
Su carrera en el mundo de las vías dio un giro en 1987, cuando fue designado como Consejero del Consejo Nacional de Transportes Terrestres, momento en el que empezó a ocuparse en profundidad del transporte por carretera y su reglamentación. Actualmente sigue formando parte de este organismo y de la Comisión de Transportes del Colegio de Ingenieros, Caminos y Puertos.
La primera Asamblea General de la Asociación Española del Transporte, en la que fue nombrado presidente de la misma, se celebró en 1984. Desde entonces sigue en el cargo de esta organización sin ánimo de lucro constituida por las entidades y empresas más significativas de la Administración y de todos los modos del transporte. La formación es quizá la labor más importante que desarrolla AET, por ello ha organizado ya 42 jornadas que abarcan toda la problemática del sector.
“Realmente estos continuos avatares de mi vida me han dejado escaso tiempo para poder disfrutar de la infancia de mis siete hijos, siendo mi abnegada mujer, querida Ascensión, la que ha tenido que sacrificarse, ocupándose de ellos en enfermedades y colegios. Nunca se lo agradeceré bastante. Al llegar a su adolescencia ya he podido orientar sus estudios e impulsar su futuro. Igualmente me ha sucedido con mis aficiones, la talla de esculturas, libros, caza y pesca, a los que sólo he podido dedicar festivos y vacaciones.”
Perfil: Antonio Carbonell, Presidente de la Asociación Española del Transporte
TESÓN
