Según el contrato, los vehículos de 12 metros se entregarán en la ciudad rumana de Reghin a finales del primer trimestre de 2022. El valor total del contrato asciende a casi 3,6 millones de euros.
Vehículos híbridos
Los autobuses Solaris encargados que se dirigen a Rumanía contarán con un accionamiento híbrido en serie que consta de un motor de tracción de 120 kW y un motor diésel de 151 kW, que cumple con los estrictos estándares de emisiones Euro 6. Una de las principales características del propulsor es su capacidad para recuperar energía cinética durante el frenado. Posteriormente, se convierte en electricidad y se almacena en supercondensadores.
Los vehículos también estarán equipados con una función Stop & Go que controla el funcionamiento del motor. Gracias a este sistema, el motor diésel se apaga completamente cuando el autobús se detiene en las paradas y las puertas se abren y se vuelve a encender solo después de que los supercondensadores se agoten. Esto le permite reducir significativamente el consumo de combustible y las emisiones contaminantes en comparación con los vehículos de conducción convencional.
Principales características
El autobús solicitado puede transportar hasta 90 pasajeros, incluidas 27 personas sentadas. El diseño de la puerta del vehículo es 2-2-2. La comodidad del viaje estará garantizada por los sistemas de calefacción y aire acondicionado en el habitáculo y la cabina del conductor, así como por las persianas de destino. Los conductores también se beneficiarán de los puertos USB duales para recargar sus dispositivos electrónicos en el camino. La comodidad de los pasajeros se verá reforzada por un sistema de anuncios por voz. Además, Solaris equipará sus vehículos con toda una gama de soluciones para aumentar la seguridad de pasajeros y conductores, por ejemplo, con cámaras CCTV interiores y exteriores y una cámara de marcha atrás adicional.
Preparados para la lucha contra la pandemia
Los vehículos de 12 metros también contarán con soluciones para mejorar adicionalmente la seguridad de los pasajeros y conductores durante la pandemia de coronavirus. El cliente rumano optó, entre otras cosas, por cabinas cerradas que limitan el contacto del conductor con los pasajeros, minimizando así el riesgo de infección. Además, los vehículos estarán equipados con un sistema de conteo de pasajeros con sensores ubicados en cada puerta, lo que permitirá al operador recopilar datos sobre la cantidad de personas que utilizan rutas particulares.