Wayne Griffiths, presidente la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), afirmó: “Necesitamos un plan industrial para el país, pero también un plan de movilidad que apoye al vehículo privado. Nuestra Hoja de Ruta 2023-25 es una palanca para acelerar la venta de más vehículos electrificados sin penalizar a nuestra industria. Europa ha exigido que seamos el único sector que va a cambiar su modelo de negocio en sólo 13 años. Y lo vamos a hacer”. Pero también alertó sobre la futura entrada de la norma Euro 7/VII. “No estamos en contra de la normativa, pero con plazos que se puedan cumplir, como ya han entendido en Estados Unidos. De una forma ordenada, bien pensada y fiable. No hay que perder el foco en nuestra prioridad, la electrificación. Porque si esa norma se pone en marcha, estamos en riesgo real de cerrar fábricas y perder miles de empleos en España”, dijo.
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, anunció que “España ya ha movilizado el 50% de los fondos destinados a la descarbonización del sector en línea con los objetivos de promover una industria automovilística sostenible y conectada que cumpla con las exigencias medioambientales y de transición energética que nos exige el Pacto Verde Europeo. Estamos en línea con las medidas planteadas por ANFAC”. Se refirió también a la creación de la Alianza para el PERTE VEC, que “impulsará el marco de colaboración público-privada”.
Por su parte, el director general de ANFAC, Jose López-Tafall, recordaba que “la industria de la automoción es una joya que tenemos que preservar y por ello hemos de diseñar nuestro propio modelo de movilidad y de industria de la nueva movilidad donde España ha de ser punta de lanza a nivel europeo.” Afirmó que “nos estamos quedando atrás respecto a nuestros vecinos europeos. Si no queremos perder nuestra cuota de ventas y competitividad en Europa tenemos que recuperar en estos tres años un mercado en torno a los 1,2 millones de unidades de los cuales, donde al menos 700.000 vehículos tendrán que ser electrificados para 2030. Pero, hasta la fecha, España no ha conseguido cumplir ni con los objetivos del PNIEC ni con los más exigentes del Fit for 55. “Tenemos que cerrar 2023 con 190.000 vehículos electrificados. La tendencia actual prevé un cierre por debajo de 100.000 unidades. Y por otro lado, hemos terminado 2022 con cerca de 18.000 puntos públicos de recarga, y el objetivo para este año es alcanzar los 45.000 puntos de recarga”. Indicó que es necesario “acelerar la electrificación basándonos en tres pilares: la infraestructura de recarga, la penetración de los modelos electrificados y la fiscalidad”.
España, a la cola de la electrificación de la movilidad en Europa
López-Tafall también dio datos preocupantes sobre el avance la electromovilidad en nuestro pais. Mientras aquí sólo estamos en un 9% de penetración en el mercado de la automoción, en Alemania está en torno al 30% y en Portugal en un 22,7%. España se queda a la cola junto con Italia.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, cerró las mesas de la mañana señalando que “la automoción es un sector fundamental de la industria en España” y que “es una industria con una elevada diversificación territorial, que juega un papel muy relevante en la economía de aquellas comunidades autónomas en las que está instalada”. La vicepresidenta ha querido además señalar que “el sector de la automoción genera más de 300.000 puestos de trabajo directo en las 17 factorías que hay en España y las más de 1.000 empresas que conforman el parque de proveedores y los fabricantes de componentes que articulan la industria del auto en nuestro país”.
Por su parte, el comisionado especial para el PERTE VEC, José María López, clausuró el evento destacando que hay que destinar herramientas para avanzar en el objetivo de desarrollar el vehículo eléctrico