APETAM advierte de la pérdida de empresas y caída de la demanda

La Asociación Provincial de Empresas de Transporte y Agencias de Málaga valora con preocupación la subida de costes, siempre constante a pesar de la recuperación económica, en el sector del transporte de viajeros por carretera. Poner un autobús en marcha cuesta ahora un 10% más por hora que en 2022 pero la demanda es un 15% inferior que en 2019.

 
Desde la asociación, tras analizar el Observatorio de Costes del Transporte de Viajeros en Autocar, se indica que “la evolución de los costes ha sido creciente, a pesar de las últimas bajadas del precio del carburante en el segundo semestre de 2022. Los costes unitarios por horas para un autobús estándar de 39 a 55 plazas han crecido desde los 54,06 a los 59,73 euros; contando en esta partida lo que cuesta tener un autobús en circulación, incluyendo gastos de personal, seguros, mantenimiento y, por supuesto, combustibles. Un 10% de subida que hace que la situación en el sector siempre sea ajustada, con poco margen de maniobra; y que impida una normal evolución cuando las condiciones económicas, como al principio de la temporada turística alta en 2023, sean más o menos positivas. El coste por kilómetro ha aumentado en un año de 1,49 a 1,66 euros (+11%).

En cuanto a la oferta interurbana y discrecional del transporte de viajeros en autocar, el número de autobuses de servicio público autorizados en la provincia de Málaga asciende, a 1 de enero de 2023, a 1.734. En la misma fecha de 2022 era de 1.561 en Málaga, lo que supone una caída del 11%.

Por su parte, el número de empresas con autobuses autorizados de servicio público asciende, a 1 de enero de 2023, a 205, lo que supone una pérdida del 7,65%, ya que en enero de 2022 se registraban 220. La media del número de autobuses autorizados de servicio público por empresa es de 6,7 a 1 de enero de 2023. En la misma fecha de 2023 era de 4,79. 

En cuanto a la demanda, el año 2022 cerró con una caída de la demanda de los viajeros del transporte en autobús del 14,75% con respecto a 2019, lo que supone una pérdida de más de 459,5 millones de viajeros en el panorama nacional y de 2,2 millones en la provincia de Málaga.

Por un lado, el transporte discrecional, que ha sido uno de los más castigados por la crisis, acumuló una caída del 28% en 2022, con 1,89 millones de viajeros frente a los casi 2,33 millones de 2019 en la provincia de Málaga. A su vez, el transporte interurbano, con 7,16 millones de viajeros (8,23 en 2019) se sitúo un 14% por debajo.

A nivel nacional, el transporte urbano registró un total de 152 millones de viajeros en autobús (183 millones en 2019) lo que supone un descenso del 16,67% respecto a la cifra alcanzada en este año prepandemia. Y, finalmente, el transporte especial (escolar y laboral) registró 3,09 millones de viajeros frente a los 3,31 millones de 2019 (-6,74%).”
 

La Asociación Provincial de Empresas de Transporte y Agencias de Málaga alerta de la insuficiencia de las ayudas, las enormes trabas burocráticas y la tardanza en los cobros

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