Esta restricción a los patinetes eléctricos afecta a las instalaciones y trenes de Metro, autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), interurbanos y urbanos de otros municipios regionales, Metros Ligeros, Tranvía de Parla y los intercambiadores de Plaza de Castilla, Moncloa, Príncipe Pío, Plaza Elíptica y Avenida de América.
Esta medida entró en vigor con carácter transitorio el pasado mes de octubre, tras explotar la batería de uno de estos dispositivos en el interior de un tren del suburbano en la estación de La Elipa, sin causar daños personales.
La determinación de impedir su acceso se revisará en 2027, fecha en la que todos los vehículos de movilidad personal (MVP) estarán obligados a disponer de una certificación de la Dirección General de Tráfico (DGT). Entonces, se volverán a analizar sus características y su posible riesgo para los viajeros.
No es la única región en la que se han producido incidentes. Su prohibición lleva también tiempo aplicándose en otras Comunidades Autónomas.
Existe también gran alarma por sus altos índices de siniestralidad.