Sustituir las marquesinas de autobús más antiguas por otras totalmente accesibles y, al mismo tiempo, reutilizar la mayor parte de los materiales de las paradas que se retiren, reducirá a la mitad los costes de instalación y, al mismo tiempo, contribuye a preservar el medio ambiente.
El gerente del Consorcio Regional de Transportes, José Manuel Pradillo, inauguró en Alpedrete, junto a la alcaldesa de la localidad, María Casado, la primera de estas marquesinas recicladas, ubicada en la
Plaza de la Constitución de este municipio. En total, la Comunidad de Madrid tiene previsto reciclar 50 marquesinas antiguas para sustituir las paradas más deterioradas por otras estéticamente más atractivas y
totalmente accesibles para personas con discapacidad física o sensorial. Las nuevas paradas contarán con guías en el suelo para invidentes e información en braille. El reciclado de las marquesinas antiguas para su aprovechamiento posterior se enmarca dentro de una iniciativa más amplia por la que el Consorcio Regional de Transportes está sustituyendo 500 paradas de autobús de toda la región por otras más modernas y accesibles.
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