En total, están sin actividad más de 1.100 autocares y no se esperan cambios al no contar con turismo extranjero, ni cruceros ni viajes del Imserso.
La situación empeora aún más porque también los traslados relacionados con el ocio, reuniones de empresa o familiares han desaparecido casi por completo.
Casi todas las plantillas de las empresas de transporte de viajeros por carretera de Baleares están en ERTE.