Abrió el acto de clausura el director del Área de Motor y Movilidad de IFEMA MADRID, David Moneo, que habló sobre los dos próximos eventos de referencia para el sector de la movilidad que se celebrarán en el reciento ferial: FIAA, del 18 al 22 de octubre de 2022 y Global Mobility Call, del 14 al 16 de junio de 2022.
También participó el responsable de Movilidad Urbana de Iberdrola, Jesús López Martín, con una ponencia sobre la descarbonización y la electrificación cómo modo de alcanzarla.
El presidente de CONFEBUS, Rafael Barbadillo, hizo repaso de la trayectoria y consolidación de la Confederación, de todos los pasos dados antes de la pandemia y durante ésta para tratar de seguir siendo un sector de referencia y con futuro. Se refirió a la difícil situación que atraviesan las empresas de transporte de viajeros por carretera: sobreendeudamiento, morosidad, caída de la facturación, el incremento de costes y la presión fiscal, entre otros problemas, como la escasez de conductores.
Barbadillo considera que sigue siendo necesaria una línea de ayudas para paliar los efectos de la pandemia que, lejos de haber desaparecido, siguen lastrando a las empresas: “Creemos necesarias, y así lo hemos solicitado en reiteradas ocasiones a la Administración, nuevas líneas de ayudas para paliar los graves efectos de la pandemia”. En concreto, solicita un nuevo fondo de 1.100 millones de euros específico y finalista para las empresas de transporte en autobús. CONFEBUS pide que de esa partida, gran parte se destine al discrecional, que es el segmento que menos ayudas ha recibido de las Administraciones desde el inicio de la crisis sanitaria.
Tras lo efectos de la pandemia ha llegado la subida de los precios de los carburantes. El presidente de CONFEBUS señalaba que urge la revisión extraordinaria de las tarifas para el transporte regular, pero también los precios de los contratos con las Administraciones de los servicios escolares.
También habló sobre la escasez de conductores, que ya no es un problema a medio y largo plazo para el sector, sino un problema real. De hecho, ya hay parte de flotas paradas, que no pueden prestar servicios turísticos porque falta personal.
Se refirió además a la necesidad de coordinar los nuevos mapas concesionales autonómicos y nacionales, y que las licitaciones de todos los contratos de servicio público de transporte apuesten claramente por la compra pública innovadora, dejando atrás las licitaciones basadas en el precio, para que no se produzca el efecto subasta. Y en cuanto al futura Ley de Movilidad Sostenible, encuentra que es muy necesaria pero quedará incompleta si no se tiene en cuenta a todos los segmentos y no sólo al urbano y metropolitano.
Se mostró contrario a la posible introducción de la tarificación por el uso de infraestructuras, que de ponerse en marcha debería dejar al autobús exento.
Ante unas previsiones muy positivas para el sector turístico, Barbadillo destacaba la importancia de contar también con una buena red de estaciones de autobús, modernas, seguras, limpias y que estén al nivel del servicio de transporte que se presta: “De poco sirve ofrecer una de las flotas más modernas de Europa si las estaciones de origen o destino suponen al final una mala experiencia de viaje”.
Precisamente sobre la modernización de las flotas, añadía que hay dos grandes retos para el sector, la digitalización y la descarbonización. En este sentido, indicó que las empresas que no pueden todavía apostar por la electromovilidad pero sí por la compra de vehículos más eficientes, también deberían recibir apoyo y que las ayudas deben atender a la neutralidad tecnológica.
Además, Rafael Barbadillo se ha referido a los dos retos más importantes que aborda el sector, la descarbonización y la digitalización de la actividad, retos en los que el transporte en autobús estaba involucrado antes del inicio de la crisis. Sobre la digitalización, ha señalado que el sector debe acelerar este proceso y, tal como ha indicado, “debemos estar muy atentos, porque los avances tecnológicos son constantes y hay que saber aprovecharlos en beneficio de nuestros usuarios y de nuestras empresas”.
Finalmente, lanzó la idea de estudiar si realmente sigue siendo necesario el uso de la mascarilla en el transporte colectivo, teniendo en cuenta que es uno de los pocos lugares en los que se mantiene su obligatoriedad.
María José Rallo, secretaria general de Transportes y Movilidad, clausuró el acto recordando la necesidad de las empresas del sector den el salto de ofrecer transporte a ofrecer servicios de movilidad, de manera integral. Ese sería el primer reto. Otros dos grandes retos son la descarbonización y la digitalización. Por último, resolver el problema de escasez de conductores, mecánicos y personal de tráfico, haciendo el sector más atractivo laboralmente. Habló también sobre las líneas de ayudas abiertas y las nuevas que llegarán, sobre la nueva Ley de Movilidad Sostenible, el diseño del nuevo mapa concesional y el reto futuro de lograr un billete único para todo tipo de transporte.
Premios CONFEBUS 2022
La Confederación también celebró su tradicional entrega de los Premios CONFEBUS 2022. Este año fueron galardonados Josefa Pérez, al frente de Autocares Carcelen, Agustín Gómez, secretario general de ASCABUS y responsable del Departamento de Homologaciones en Grupo Castrosua durante más de 30 años, y Salvador Servera, gerente de la FEBT.