Las redes de transporte público que gestiona TMB son referencia en adecuación a personas con movilidad reducida y personas con discapacidad. Aún así la empresa está siempre trabajando haciendo evoluciones y mejoras dentro del diálogo permanente con las entidades representativas y el Instituto Municipal de Personas con Discapacidad, en un proceso continuo que se enmarca en el desarrollo del Plan Director de Accesibilidad Universal, aprobado en 2010.
A modo de ejemplo, fruto de la interacción con los colectivos y las administraciones, y del impulso y la implicación de TMB, desde 2017 las redes de metro y autobuses admiten el acceso de personas con movilidad reducida usuarias de scooters eléctricos homologados, como anticipo de la futura regulación general del acceso seguro de estos vehículos para personas con movilidad reducida al transporte público.
Gestión de la accesibilidad en TMB
La innovación, la tecnología y la evolución de las normativas para adaptarlas a su usabilidad, son elementos clave que se trabajan desde TMB para un transporte público universal.
En 2017 se creó el Servicio de Accesibilidad Universal de TMB, asumiendo desde el Área de Clientes y Clientes el compromiso de garantizar una movilidad que responda, no sólo a las necesidades de las personas con discapacidad y con movilidad reducida, sino también a sus expectativas de un transporte público para todos.
Desde el Servicio de Accesibilidad Universal se trabaja cada día con los objetivos de cumplir con el marco normativo en materia de accesibilidad y no discriminación en razón de barreras físicas, de comunicación o de actitud, velar por la formación y la sensibilización del personal en las necesidades específicas de la ciudadanía, especialmente de las personas con discapacidad, y potenciar el diálogo y la participación con las entidades representativas atendiendo a sus necesidades, expectativas y prioridades.
La red de bus
Desde 2007, toda la red de autobuses correspondiente a la flota de TMB, 1.135 vehículos, están preparados para transportar personas con discapacidad y movilidad reducida. Los vehículos vienen totalmente equipados con rampas, plataforma baja, sol antideslizante, áreas reservadas por personas usuarias de sillas de ruedas y asientos de uso preferente para personas con movilidad reducida. Los pulsadores con sistema braille para personas con discapacidad visual, o el sistema de información visual y acústica a bordo de los vehículos y en muchas paradas por personas con discapacidad sensorial, son otras de las acciones en materia de accesibilidad que TMB ha venido implantando en los últimos años para llegar a la plena inclusión.
Desde el año 2020 también está disponible el sistema de opciones de guía en la parada de bus (Funcionalidad Beacons Bus). En este sistema la persona usuaria recibe información a través de la TMBApp sobre las líneas de bus que confluyen en una parada, la frecuencia de paso del bus seleccionado y su estado (en términos de proximidad y estado de las puertas), por dar respuesta a las necesidades específicas de las personas con discapacidad visual. También, en todas las paradas de bus se han implementado las etiquetas ddTag que a través de la App de Navilens permite orientarse de la ubicación de la parada y tener información accesible de la información de los próximos buses.
También se han trabajado nuevos protocolos en los procesos de mantenimiento de rampas y la renovación de flota que da un impulso a la fiabilidad de los sistemas de todos los vehículos de la red de bus de TMB.
La red de Metro
En la red de metro se dispone de 165 estaciones de las cuales 153, un 92% del total, están equipadas con ascensores de conexión entre la calle, el vestíbulo y los andenes.
Del 8% restante, cuatro estaciones (los intercambiadores de España y Maragall) están en obras y el resto en licitación o tramitación, todo por parte del Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, que es el que lleva a cabo el proyecto de mejora de la accesibilidad a los sistemas ferroviarios de su competencia. Las líneas L2 y L11 ya están adaptadas, según el criterio de la Generalidad de Cataluña, desde su entrada en servicio, así como los tramos de las nuevas líneas L9 y L10.
En cuanto a las acciones implementadas en los andenes, cabe destacar las rampas de metal para nivelar el acceso instaladas en 53 estaciones, los encaminamientos por personas con discapacidad visual, la inclusión de navegadores acústicos y por voz en las máquinas de venta de billetes, los mapas o la guía de metro publicada en relieve y en sistema braille.
Por otro lado, está funcionando el sistema de señalización digital para personas con discapacidad visual a través de etiquetas inteligentes ddTags con la App de NaviLens, al igual que la señalización de prioridad absoluta de los ascensores para personas con movilidad reducida y gente grande.
Respecto a los trenes, no olvidemos los espacios reservados para personas usuarias de sillas de ruedas y cochecitos de bebé, los soportes isquiáticos, los asientos reservados para personas con movilidad reducida o las señales acústicas y luminosas de aviso de cierre de puertas.
Cabe remarcar la importante participación de las principales entidades representantes del colectivo y sus técnicos, así como del Instituto Municipal de Personas con Discapacidad (IMPD) del ayuntamiento de Barcelona en el proyecto por la definición de las características de accesibilidad de los espacios interiores de los nuevos trenes que ha adquirido TMB en su última compra histórica de 42 trenes.
Fotografía de TMB
