Desde marzo de 2020 el sector solo ha tenido acceso a un fondo de rescate, valorado en 420 millones de euros, que compensó la bajada del primer año de crisis. “Somos la alternativa para garantizar la movilidad de los ciudadanos de manera inclusiva y sostenible y, sin embargo, nos encontramos solos”, explica Jesús Herrero, secretario general de ATUC.
ATUC ya ha advertido de que el transporte público sigue sin recuperar los viajeros prepandemia
Las cuentas de las empresas se han visto agravadas no solo por la difícil situación originada por la crisis del coronavirus, sino también por la crisis energética: “hemos tenido que hacer frente al incremento de los precios de los carburantes, la energía y gastos de personal sin una batería de ayudas concretas para el sector”, apunta Herrero. “Estamos en una situación crítica en la que necesitamos un nuevo fondo de rescate para compensar el agujero de más de 1.000 millones de euros que sufren nuestros asociados”.
Tampoco ha ayudado al transporte público ser único de los últimos lugares en los que ha sido obligatorio el uso de la mascarilla hasta hace unos días. Esto, para ATUC, ha sido una medida “estigmatizante” para el sector.