De este modo, las empresas de transporte que utilizan los dispositivos de Ruptela se benefician de una solución integral de gestión de la flota que incluye el control en tiempo real de los neumáticos.
Integrando ambos sistemas, el control de la presión de los neumáticos será más fácil y transparente. Los datos recogidos en tiempo real con ContiPressureCheck estarán disponibles tanto para la flota como para el conductor del vehículo gracias a la conexión con el sistema de Ruptela. En el caso de producirse una desviación con respecto a los valores previstos, tanto los gestores de la flota como los conductores podrán reaccionar rápidamente y evitar así posibles períodos de inactividad que pueden suponer pérdidas de tiempo.
El sistema ContiPressureCheck se compone de un transmisor de 2 cm de longitud y menos de 20 gramos de peso (sensores incluidos), y de un procesador que se acopla al interior de la banda de rodadura del neumático en un soporte de goma. Cuando se cambia el neumático, el procesador se puede extraer del soporte para volver a utilizarlo en un nuevo neumático. La batería dura unos seis años o, aproximadamente, 600.000 km. ContiPressureCheck es compatible con neumáticos de todas las marcas y con todo tipo de vehículos.